El jueves, día 19, como estaba programado, nos encontramos en Ávila, en la casa de la Santa, los Consejos de la Provincia de Castilla y de Burgos, con sus respectivos Provinciales, y el Consejo de la Federación de Castilla-Burgos de Madres Carmelitas, con su Presidenta. La reunión fraterna comenzó convirtiendo en pregunta las palabras de la Santa: “¿Qué tales habremos de ser…” para vivir como Carmelitas hoy? A la lluvia de respuestas siguió el rezo de vísperas y la oración. Y tras la cena, una feliz y gozosa recreación al más puro estilo carmelitano. Cerrábamos la jornada con un rato ante el Santísimo en la “interior bodega”, una capilla originalmente preparada en lo que fuera en la antigüedad una bodega castellana. El viernes lo comenzamos con la Misa y las laudes en la capilla donde, dicen, nació la Santa. Y después conversamos fraternalmente sobre los procesos de reestructuración tanto de las monjas, como de los frailes. El tiempo de la mañana se hizo corto, para afrontar tales temas. Todo fue recogido con maestría por el secretario “ad casum”, P. Miguel Márquez, Provincial de Castilla, que en su momento nos hará llegar la síntesis. Baste por el momento decir que el encuentro además de fraternal, fue una bendición para todos.