Gijón
Cerrábamos el viernes pasado, día 17, el certamen, cuarto ya, de corales que celebramos en nuestra parroquia. Disfrutamos durante ocho días con la buena música y quitamos el frío con abundantes y cariñosos aplausos. Y el sábado, 17, con los niños y sus papás teníamos la fiesta del carnaval, llenado la parrqouia de vida, colorido y alegría sana. Ataviados con los disfraces, los niños hicieron primero gala de ingenio desfilando con gran maestría, para luego participar de la Eucaristía y acabar la fiesta con un compartir los dulces asturianos típicos de estos días: casadielles, picatostes y frisuelos.
NO podemos sino estar satisfechos en ese intento de ampliar la pastoral abranzando también a la cultura y la fiesta.
Documentación:
docCORALES.doc